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Conoce cuáles son los beneficios tras tomar una ducha fría
Altas temperaturas, sudor y ropa mojada. Estos son los ingredientes más destacados durante este mes de agosto y los primeros días de septiembre en muchas zonas españolas. Parece que el calor ha querido ser uno de los protagonistas de las noticias del año y nos acompañará durante los próximos días. Cuando existen estos días de calor, la gente acude a la piscina y a la playa para combatirlo, pero en caso de no poder hacerlo, la gente siempre opta por una ducha de agua fría. ¿Conoces cuáles son sus beneficios? Aquí, te los contamos todos.
Un tratamiento natural utilizado hace miles de años
Las duchas de agua fría, han tenido protagonismo desde hace muchos siglos. De hecho, hasta hace pocos años, tomar una ducha caliente suponía un lujo puesto que la gente no podía hacerlo y se decantaba por las duchas frías.
Se decía que el agua fría era para las personas fuertes, puesto que condicionaba os cuerpos y mentes para ello y mantenerse vigorosos y estar al pie del cañón. Asimismo, diversas culturas en el mundo usan el agua fría como parte de sus ceremonias religiosas. Los japoneses Shinto, practica el ritual Misogi, que significa sentarse o estar bajo una catarata para así purificar el alma.
La ducha fría mejora tu salud física
La fuerza que tiene el agua fría en la piel, hace que el corazón lata más deprisa y que los músculos se flexionen. Este hecho, envía sangre a los músculos y a los órganos vitales, mientras que el agua caliente mueve la sangre hasta la superficie de la piel.
Así pues, alternar agua fría y caliente es una buena forma de estimular la circulación y mejorar el sistema nervioso. Por otro lado, los antiguos samuráis japoneses, vertían cubos de agua helada a sus cabezas de buena mañana para limpiar el espíritu. Las duchas frías, liberan componentes químicos en el cerebro para mejorar el humor, disminuir la ansiedad y aliviar la depresión. Así pues, estimulan la secreción de noradrenalina en el cerebro y cuando el agua fría toca nuestro cuerpo, la respiración es más profunda por el shock. Es la manera que tiene para mantener caliente al aumentar la toma de oxígeno. La tasa cardíaca también aumenta, por el hecho de que una oleada de sangre al cuerpo hará que tengas más energía.
Tras hacer deporte, el agua fría es útil para recuperarse, por lo que los atletas siempre se decantan por ellas. Además, estos baños disminuyen las inflamaciones. Exponerse al frío, mejora nuestra capacidad de controlar el estrés y se usan para disminuir el dolor crónico y mejorar la calidad del sueño. Por otra parte, estimula que las toxinas se eliminen de la piel y de esta forma no causan infecciones. Ahora que conoces cuáles son los beneficios, es el momento de que te tomes una ducha fría y poco a poco vas incorporándola para obtener todos sus beneficios.